Peligroso pero imprescindible en nuestras vidas, este animal de un ojo que nos mira de frente, resulta un ser más de nuestro entorno y una herramienta insustituible de trabajo, sus ventajas son infinitas y a veces nos hace la vida más fácil,  pero su uso entraña riesgos…

Y no hablamos de los infames virus, los hackers, el phising y demás ataques cibernéticos. No son éstos los mayores riesgos para las personas, pero sí los relacionados con las posturas de espalda, cuello, hombros, mano-muñeca…y las afecciones a la vista.

Casi siempre infravalorado desde el punto de vista de los riesgos laborales, el trabajo en oficina es  responsable de trastornos musculoesqueléticos (TME), fatiga visual y dolor de cabeza de muchos usuarios. El ordenador contribuye en gran medida a estas molestias, que de forma reiterada pueden redundar en problemas. Así que en este post vamos a prestar atención a la pantalla, al teclado y al ratón por ser los elementos fundamentales del equipamiento informático que interaccionan con el usuario.

La pantalla

No es suficiente colocarla en la zona principal de la mesa y situarnos enfrente. La pantalla merece más atención ya que es la parte del equipamiento informático que más influye en la generación de fatiga visual y en los TME.

Algunas consideraciones :

• Colocación:
  • Nunca la distancia horizontal entre los ojos del usuario y el extremo superior del monitor será inferior a 40 cm.
  • El borde superior de la pantalla debe quedar a la altura de sus ojos y todos los planos que habitualmente deben ser visualizados por el usuario (pantalla y teclado) deben serlo bajo un ángulo no superior a 60 º.
• Tamaño:
  • Trabajos de lectura          14″
  • Trabajo con gráficos        17″
  • Trabajo de proyectos       20″
• Resolución:  lo más parecida a la de un documento escrito
  • Trabajos de lectura          640×480 píxeles
  • Trabajo con gráficos         800×600 píxeles
• Estabilidad de la imagen
  • Se relaciona con la frecuencia de refresco de la pantalla y la frecuencia mínima recomendada es de 70 Hz. Comprueba en las opciones de configuración de tu pantalla si cumples esto. En muchos casos la frecuencia es de 60 Hz, lo cual debe evitarse ya que produce fatiga visual.
• Polaridad
  • Es conveniente que el usuario pueda elegir entre polaridad positiva y negativa para adaptarla a las condiciones de trabajo y a sus propios requerimientos.
• Brillo, contraste, color:
  • Debemos poder ajustar brillo y contraste entre el fondo de la pantalla y los caracteres, para que éstos destaquen
  • Luminancia (relacionada con el brillo percibido al leer sobre la pantalla) mínima de 35 y preferible 100 Cd/m2
  • Contraste entre fondo y los caracteres, al menos la relación 3:1.
  • Hay que evitar determinadas configuraciones de colores (azul en imágenes pequeñas, azul sobre fondo reojo…). Como norma general minimizar el número de colores empelados y emplear el juego preestablecido de los colores que ofrecen los programas
  • Para saber más sobre colores: UNE-EN-ISO 9241-8: Requisitos ergonómicos para trabajos de oficina con pantalla de visualización de datos (PDV). Parte 8, Requisitos para los colores presentados.

El ratón

No conviene, dejarse llevar por los ojos a la hora de adquirirlo, ni envidiar tanto el del vecino por ese ratón anatómico con tan buena pinta, ya que resulta no ser tan bueno desde el punto de vista ergonómico, a menos que se haya diseñado de forma personalizada.

¿Qué le tenemos que pedir al ratón? Aunque sencillo hay que tenerlo en cuenta:

• Adaptación a la curva de la mano y a las dimensiones de la misma.
• Formas suaves y redondeadas
• Permitir el apoyo de una parte de la mano,  la muñeca o los dedos sobre la mesa
• Pulsadores de activación: descansar mano sin activarlos
• Superficie poco conductora del calor
• Configuración para diestros y zurdos: para ello las formas del mismo deben ser no demasiado adaptadas a la mano deercha

Teclado:

Debe considerarse que cuanto más alto y más inclinado está el teclado más se doblan las muñecas. La máxima en su diseño y en  su manejo se puede resumir como:  ”minimizar la extensión y flexión de las muñecas”

• Debe estar separado de la pantalla
• Inclinación ajustable con mecanismo sencillo
• Superficie con acabado mate y color suave, y libre de aristas y esquinas vivas
• Distancia entre usuario y teclado mínima de 10 cm, para apoyar los antebrazos en la mesa.

¿Hemos aprehendido bien estas pautas ? Compruébalo tú mismo: ¿Qué está bien y qué está mal en esta foto?

BIEN: La posición de la pantalla es adecuada:

• Altura: borde superior de la pantalla en la misma línea que los ojos.
• Zona de visión óptima 30º
• Distancia de los ojos a la pantalla mayor de 40 cm.

MAL: El apoyo sobre la mesa:

• Fundamental apoyar los antebrazos al teclear y usar el ratón (distancia entre el borde de la mesa y el teclado mínimo 10 cm)

Portátiles, ipads y demás virguerías 

Coincidiereis conmigo en que estos dispositivos, por ahora no cumplen estos requisitos, y está claro que no vamos a prescindir de ellos.

¿Qué hacer entonces? Si la primera opción era desecharlos, la segunda es usarlos, pero “bienusarlos”, en su justa medida, como complemento a un equipamiento que cumpla con lo arriba descrito y dotarse de teclados y de accesorios que hagan más fácil y seguro su manejo.

Y por supuesto evitar las posturas enemigas de la espalda, hombros y cuello, como apoyar el portátil en las piernas cual si de mesa camilla se trataran.

En definitiva, no estamos hablando de inversiones económicas y sí de salud y prevención. Sencillamente se trata de detenernos y mirar nuestros elementos y a nosotros con ellos, para “adaptar-nos-los” y seguir trabajando. Evitando así visitas frecuentes al fisioterapeuta, problemas tempranos de la vista, inconvenientes en el trabajo, etc.

Confirma el hecho de que no es una cuestión baladí la existencia de legislación emitida al respecto. El Real Decreto 488/1997, de 14 de abril, sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas al trabajo con equipos que incluyen pantallas de visualización en su Anexo se establecen las disposiciones mínimas de utilización de las PVD, algunas de las cuales se han recogido en este artículo.

Dicho esto, no nos olvidamos de la mesa y la silla de oficina, complementos indispensables del equipo informático y de los que nos ocuparemos más adelante, con el fin de que el conocimiento de las partes y del conjunto nos permita adoptar unos hábitos de trabajo más saludables.

Y recordad, las condiciones ergonómicas no dependen sólo del equipo si no del uso que se haga del mismo.

Bibliografía:

• Apuntes Ergonomía Instituto Biomecánica de Valencia, Máster Prevención Riesgos Laborales.
• Apuntes Universidad Politécnica de Valencia: Riesgos Laborales del trabajo ofimático.